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EPO.-SANTO DOMINGO.- La administración del Restaurant Casa Club Neptuno, en Boca Chica, acusó al procurador general de la República, Jean Alain Rodríguez, y a la fiscal de la provincia Santo Domingo, Olga Diná Llaverías, de estar detrás del embargo realizado en ese establecimiento, el cual considera se realizó de manera ilegal y arbitraria.
Jesús Tavares y sus abogados Tomas Castro y Juan Antonio Pérez aseguran que la acción fue ejecutada por órdenes de la magistrada Diná Llaverías, a quien acusan de que recibiría un soborno de diez millones de pesos, según ellos, a sabiendas de que existía una querella por falsedad de firmas interpuesta por la propietaria del establecimiento, Avis Altagracia Soto, contra la empresa Concolor S.R.L y su propietario Eduardo Jana Piñeiro, en el contrato de arrendamiento del local donde opera Ziva Restaurant, en el ensanche Piantini, del Distrito Nacional
Asimismo, dijo que el embargo a Neptuno`s se realizó en represalia por una demanda al señor Jana, quien, dijo, pretendía sacarla del local de Ziva Restaurant sin haber vencido el contrato arribado entre las partes para tales fines, valiéndose de documentos con firmas falsificadas.
Dijo que utilizando influencias judiciales y desde el gobierno Tavárez y sus representantes legales exigieron que el caso sea debidamente investigado, ya que, según afirma, el mismo le fue arrebatado ilegalmente por el fiscal adjunto, Juan Miguel Vásquez a la magistrada Aura Celeste Suriel, de lo que deducen que habría contubernio con las autoridades.
Advirtió que la acción, la cual calificó como abusiva y arbitraria, busca dañar la buena imagen del establecimiento comercial, debido a la acogida que ha tenido en la población durante más de 20 años, por lo que manifestó llevarán hasta las últimas consecuencias.
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