En su primer cumpleaños, en 1985, Karin Scholtz hizo una foto de sus trillizos, Peter, Mark y Dennis. Estaba tan contenta que hizo coincidir los tonos de sus ropas e incluso hizo un bonito gesto para que las colgaran juntas. Creía que algún día se convertiría en un recuerdo maravilloso, algo que los chicos recordarían dentro de unas décadas y con lo que se sentirían bien. No tenía ni idea de que esta foto daría lugar a 33 años de fotos de los chicos posando juntos, mostrando la evolución de sus personalidades a lo largo de sus vidas. Te sorprenderá la disparidad entre tres décadas y tres años
Durante 33 años, los trillizos se hicieron la misma foto de cumpleaños, puedes ver el cambio
La historia comenzó en su primer cumpleaños
Las trillizas empezaron a hacerse fotos en 1985, en su primer cumpleaños.
La historia empezó en su primer cumpleaños
Su madre, Karin, simplemente pretendía hacer una foto de sus hijos mientras se metían tarta en la boca, así que accidentalmente inició la tradición.
Dos años significan camisetas de fútbol y sonrisas
Cuando cumplieron dos años, Karin inventó otro símbolo al que adherirse. Esta vez eran un poco más conscientes de lo que ocurría a su alrededor, y estaban encantados de hacer cola y posar para la cámara cuando se lo pedían. ¡Se portaron muy bien!
El tercer aniversario marca el momento en que la foto se convirtió en una costumbre
La decisión de Karin de hacerse una foto anual de cumpleaños con sus hijos no se tomó hasta que éstos cumplieron tres años. De hecho, fueron ellos quienes la instigaron, ya que estaban allí con su cartel para hacerse una foto con él.
El tercer aniversario marca el momento en que la foto se convirtió en una costumbre
Peter, Mark y Dennis colocaron sus carteles en el sofá mientras sonreían alegremente a la cámara. Cada uno de ellos iba vestido con jerseys de Snoopy que hacían juego entre sí.
Cuatro años: su identidad empezó a sentirse
Cuando por fin cumplieron cuatro años, Peter, Mark y Dennis decidieron empezar el primer curso de primaria. Sin embargo, la costumbre persistió y el grupo mantuvo sus trajes iguales y sus carteles de cumpleaños a mano. Se celebró una ronda de lucha libre entre al menos dos de ellos.
Cuatro años: sus identidades empezaban a sentirse
Este cumpleaños también marcó el comienzo de la aparición de sus personalidades individuales; en ese momento, Mark y Dennis estaban encaramados a un juego, mientras que Peter estaba tumbado. Puede que se parezcan, ¡pero sus personalidades no podrían ser más distintas!
Su quinto cumpleaños fue difícil
Los rostros de los chicos mostraban preocupación, lo que sugería que su quinto cumpleaños fue difícil para ellos. Fue entonces cuando a Karin, su madre, le diagnosticaron la enfermedad de Parkinson y empezó el tratamiento. Esta vez, su alegría no es tan grande como la última vez.
Su quinto cumpleaños fue difícil
Sin embargo, quería celebrar su quinto cumpleaños con las mismas fiestas de todos los años. Preparó una tarta para sus hijos, les compró jerseys a juego y les fotografió con el símbolo anual correspondiente a su año de nacimiento. Es concebible que recuperen la compostura.
Una sonrisa en su sexto aniversario
Tras celebrar su sexto cumpleaños, los chicos volvieron a ser todo sonrisas. A todos les iba bien en el colegio, estaban haciendo nuevos amigos e incluso su madre empezaba a sentirse un poco mejor. ¿Qué sería de una foto de ellos en su cumpleaños sin los jerseys asociados a ellos?
Volvieron a sonreír en su sexto cumpleaños
Cuando se preparaban para hacerse la foto anual de cumpleaños, no podían contener su emoción. Han mantenido viva la tradición, y este año, en su sexto cumpleaños, están más florecidos que en el quinto. Estos chicos han recuperado su brillo juvenil.
Los jerseys a juego molaban mucho el año pasado – Cumpleaños nº 7
Los chicos se estaban haciendo mayores, y cuando llegó el momento de hacerse la tradicional foto de cumpleaños de todos los años, algo sucedió. Para celebrar el séptimo cumpleaños de Peter, Mark y Dennis decidieron hacer algo diferente, ¡pero también un poco parecido!
Los jerseys a juego les sentaron tan bien el año pasado – 7º cumpleaños
Este año fue el primero en que los trillizos no llevaron jerseys a juego En su lugar, eligieron combinaciones con varios jerseys debajo. Sin embargo, siguen llevando jerseys a la vez, ¡y parece que les gusta!
Su octavo cumpleaños marcó el final de su estancia en casa
En la celebración del octavo cumpleaños de los niños, continuaron con su nueva costumbre de llevar un jersey distinto cada año.
Su octavo cumpleaños marcó el final de su estancia en casa
Optaron por usar tonos diferentes, pero el estampado de lunares de su ropa siguió siendo el mismo.
El noveno cumpleaños fue un nuevo comienzo
Durante un tiempo, Wilma, la vecina de al lado, acogió a los tres niños y a su madre. De hecho, ayudó a Karin a hacer el cartel del noveno cumpleaños de los niños para que pudiera ser fotografiado. Aunque tardaron un año entero, los chicos y su madre consiguieron por fin volver a casa.
El cumpleaños nº 9 fue un nuevo comienzo
En cuanto les fue posible, la pequeña familia se trasladó a una caravana mientras esperaban a que renovaran su casa. Ahora que se han reunido, los chicos tienen motivos para estar radiantes de felicidad. Son completamente distintos de cuando eran muy pequeños.
Peter les hizo la foto del décimo cumpleaños
Los chicos estaban madurando muy deprisa. Decidieron poner en marcha una iniciativa original para celebrar su décimo cumpleaños, que se acercaba rápidamente. Peter había reducido sus gastos y ahora era el orgulloso propietario de una cámara de la mejor calidad.
Peter les hizo la foto de su décimo cumpleaños
¡La que te daba fotos de mejor calidad gracias a un temporizador y un flash! Así que, una vez activado el temporizador, los chicos empezaron su cartel anual de cumpleaños y, utilizando la flamante cámara de Peter, hicieron la foto de rigor. Los resultados son notables; a los 10 años, los chicos ya tienen un aspecto elegante.
La foto muestra a una niña en su 11 cumpleaños
Puede que Peter acabara de cumplir 11 años, ¡pero parece que ya era un hombre tramposo! Su hermano fue el primero en iniciar una relación con una mujer. Después del colegio, salían con Eva, mientras que Peter y Dennis iban de un lado para otro a los 11 años y cometían errores.
La foto muestra a una joven en su 11 cumpleaños
Hablaban entre ellos. Sin embargo, sacaron su foto anual con dos de ellos mostrando expresiones neutras y el tercero con cara de sonreír sarcásticamente.
A Peter le diagnosticaron epilepsia el día que cumplió 12 años
Los trillizos se sintieron algo peor de lo habitual el día de su 12 cumpleaños.
A Peter le diagnosticaron epilepsia en su 12 cumpleaños
Mientras Mark y Dennis se preparaban para pasar de la escuela primaria a la superior, Peter se enfrentó a un problema médico que ninguno de los dos había previsto que se encontraría.
Al cumplir 13 años, Peter se separó de sus hermanos
Cuando los hermanos tuvieron la oportunidad de celebrar su 13 cumpleaños, los padres de Peter llegaron a la conclusión de que lo mejor para él sería continuar sus estudios de primaria mientras sus hermanos pasaban a secundaria.
En su 13º cumpleaños, Peter fue separado de sus hermanos
Después de hoy, nunca más deberían estar separados el uno del otro en un entorno escolar. Las crisis por las que pasó se debieron a nuevas experiencias, y el cambio de escuela fue sin duda una de ellas. Sin embargo, los chicos han mantenido su tradición de celebrar el cumpleaños del otro haciéndose fotos con el mismo símbolo, y siguen pareciendo insepara
Peter llegó finalmente a la escuela el día en que cumplieron 14 años
Cuando los chicos cumplieron 14 años, Peter ya estaba preparado para matricularse en la escuela secundaria. Peter, que a menudo era considerado uno de los alumnos con más talento de su clase, creció rápidamente cuando cambió de colegio.
Peter llegó por fin al liceo el día de su 14 cumpleaños
Ahora que estaba de nuevo con sus hermanos, también le resultaba más fácil. Sin embargo, ahora que son adultos, los chicos en su foto anual aparecen con sonrisas en la cara y los labios apretados, un reflejo perfecto de la ansiedad adolescente. Sin embargo, el del extremo izquierdo no se ve sonriendo tanto como debería.
