Las tropas estadounidenses en Corea del Sur y las tropas de la República de Corea están en disposición de combate, afirmó el presidente del comité de los jefes de Estado Mayor surcoreano, Lee Sung-jin.
"Después de la prueba nuclear de Corea del Norte, su Ejército puede realizar una provocación repentina", dijo Lee Sung-jin. En este sentido, según él, "los militares deben estar preparados para contrarrestar cualquier provocación por parte del Norte, para mantener la paz y la estabilidad en la península coreana".
Lee Sung-jin y el comandante de las fuerzas estadounidenses en Corea del Sur, el general Curtis Scaparrotti, visitaron la base aérea estadounidense en la ciudad de Osan.
Lee Sung-jin y Scaparrotti "reafirmaron su determinación de disuadir al Norte de nuevas provocaciones", reza un comunicado del Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur.
El pasado 6 de enero medios informativos oficiales norcoreanos anunciaron el éxito de su primera prueba de una bomba de hidrógeno, lo que suscitó la condena de muchos países. La explosión provocó un sismo de magnitud 5,1 cerca del sitio habitual de pruebas nucleares de Corea del Norte.
Tras el ensayo se celebró una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU.
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