Esperanza. Cientos de sus residentes marcharon ayer tarde en contra de la ola de violencia que arropa el municipio, la falta de seguridad ciudadana y la alta tasa de criminalidad.
La caminata contó con el respaldo de la Iglesia católica, comerciantes, industriales, representantes del sector zona franca, sectores organizados, liceos, escuelas, organizaciones de paz y cientos de fuerzas vivas del municipio.
“Los que queremos la paz, somos más” fue la frase que movilizó a cientos de personas vestidas de blanco y en actitud de oración, durante una movilización desbordante por toda la avenida María Trinidad Sánchez en Esperanza.
Primer paso
“Esta marcha solo es un primer paso para que Esperanza salga de toda esta intranquilidad”, manifestó el párroco Santos Monción de la parroquia Nuestra Señora de la Esperanza, quien además indicó que el nuevo gobierno de Medina debe priorizar de urgencia la salud y la seguridad ciudadana.
Manifestó que no es justo que un municipio tan productivo sea sacudido por la inclemencia y la falta de consideración. Considera que los grupos sociales de protesta no tienen métodos de reclamo y han convertido al municipio en un campo de tiro, donde se expone la vida de lo más preciado que es la familia. “Cuando terminan los tiros, el problema sigue ahí, esta facilidad de protesta solo sirve para perjudicarnos a nosotros mismos”, apuntó el religioso.