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Aunque Kirkpatrick, la candidata demócrata que quiere arrebatarle la silla al octogenario senador John McCain se subió al púlpito antes de Michelle y gritó emocionada que tras ver el último debate presidencial estaba “más lista que nunca para votar”, la atracción que generan las grandes figuras del partido demócrata en Arizona, no se refleja en su propia candidatura.
Kaily, 17, Marta, 56 y Johanna Muñoz, 29 asistieron al rally de Michelle Obama en Phoenix, Arizona el 20 de octubre de 2016. Aunque portaban botones de la candidata demócrata al senado Ann Kirkpatrick, están más conectadas con la carrera presidencial. Jenny Manrique/Univision
“Creo que sería una buena senadora, y no quiero más a McCain”, dice Johanna Muñoz, una hispana de 29 años que trabaja en el sector educativo y se considera feminista. “Aunque la verdad yo estoy aquí por Michelle”.
No solo McCain le lleva una cómoda ventaja a Kirkpatrick en todas las recientes encuestas (el promedio de Real Clear Politics le da al republicano 53% de intención de voto frente al 37% de la demócrata) sino que si se mira la representación de Arizona en la cámara baja, “las sillas de los distritos congresionales van a permanecer donde están. Vamos a seguir con 5 republicanos y 4 demócratas” asegura Richard Herrera, profesor asociado de la escuela de política y estudios globales de la Universidad Estatal de Arizona.
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Es posible que el estado que ha votado republicano en 15 de las últimas 16 elecciones, pueda convertirse en azul gracias en parte a la retórica antiinmigrante de Donald Trump, sumada a la artillería pesada que la campaña de Clinton envió esta semana aquí - además de Michelle hubo sendos mítines de Bernie Sandersen Tucson y Flagstaff y de Chelsea Clinton en Tempe.
Sin embargo, expertos aseguran que el resultado se reflejará sólo en una posible victoria de la exsecretaria de Estado.
“La visita de los grandes emisarios de Hillary puede estimular a los indecisos o a los que no tienen un partido preferencial a salir a votar por ella”, agrega Herrera, “pero de ahí a que los republicanos que buscan su reelección en los distritos congresionales estén en peligro, hay una gran diferencia”.
La primera dama Michelle Obama saluda al público luego de un acto de campaña a favor de la candidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, el jueves 20 de octubre de 2016 en Phoenix. (AP Foto/Ross D. Franklin) The Associated Press
Todas las encuestas, sin duda, dan como ganadores a los titulares de ocho de los nueve distritos de Arizona y por grandes márgenes. La silla que deja la congresista KirkPatrick en el distrito 1, que ha sido considerado como uno de los más competitivos del país, es la más reñida: El demócrata Tom O'Halleran quien ha servido en el senado local y fue republicano hasta 2014, se enfrenta al sheriff del condado de Pinal, Paul Babeu, quien ha construido su identidad política como un halcón de la seguridad fronteriza, pero que todavía enfrenta críticas por una relación homosexual que habría tenido con un inmigrante indocumentado en 2012.
Ambos candidatos han recogido más de un millón de dólares para sus respectivas campañas según cifrasdel Center for Responsive Politics, y por ahora las encuestas (realizadas mayoritariamente por los demócratas) ubican al republicano cinco puntos por debajo.
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“En la silla que deja KirkPatrick tenemos una pelea cercana”, reconoce el congresista Rubén Gallego quien tiene una cómoda ventaja en su propia carrera reeleccionista en el distrito 7. “Pero es la primera vez en mucho tiempo que tenemos una coordinación de todas las campañas a lo largo de la boleta electoral.Confío en que el voto temprano nos ayude”, le dijo el político a Univision Noticias.
El partido republicano en Arizona, contactado por Univision, prometió una respuesta de su presidente Robert Graham sobre las contiendas locales, pero al momento de la publicación de esta nota no se había recibido. El mismo Graham en anteriores conversaciones con Univision ha expresado que no hay forma de que este estado se torne azul, “ni con toda la inversión que promete el partido demócrata”. El jefe de campaña de Hillary Clinton, Robby Mook, anunció recientemente una inversión de dos millones más en anuncios en Arizona.
El factor Trump
La candidata KirkPatrick por su parte se mostró desconfiada de las encuestas de su propia carrera. “Cuando me he lanzado como candidata a los distintos cargos públicos he ganado siempre aunque las encuestas hayan dicho lo contrario”, aseguró a Univision.
En esta imagen de archivo, tomada el 6 de noviembre de 2012, la candidata del distrito 1 Ann Kirkpatrick, demócrata de Arizona, saluda a su llegada a una sala llena de partidarios durante la noche electoral en Flagstaff, Arizona. (Foto AP/Ralph Freso) The Associated Press
La demócrata sostuvo que tras el debate en el que se enfrentó a McCain, los votantes “quedaron aún más furiosos”, al oírlo decir que “votará en contra de cualquier nominado que Hillary Clinton postule para la Corte Suprema”, una de las líneas más polémicas del careo entre ambos.
“En alguna ocasión, él votó por el juez Merrick Garland y ahora ni siquiera acepta reunirse con él. Los contribuyentes quieren que McCain haga su trabajo. Su postura es un peligro para la democracia”.
Cabe mencionar que los últimos sondeos que favorecen al republicano no toman en cuenta ni su actuación en el debate, ni el hecho de que después de mostrarse francamente incómodo con el nominado de su partido, Donald Trump, durante casi toda la campaña, finalmente le retirara su apoyo tras el escándalo generado por el video en el que el magnate hace comentarios lascivos sobre las mujeres.
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“Es posible que algunos fervientes seguidores de Trump quieran darle la espalda a McCain, pero es bastante improbable que los republicanos conservadores que han reelegido a su senador por años, se vayan a las filas de KirkPatrick, diga lo que diga”, aseguró a Univision Noticias Barbara Norrander, profesora de ciencias políticas de la Universidad de Arizona en Tucson.
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El factor latino
La experta asegura que la única carrera que puede cambiar es la que libra el sheriff del condado de Maricopa, Joe Arpaio y que su destino está muy atado a lo que han hecho organizaciones hispanas y de derechos civiles en su lucha por los inmigrantes, “no es solo mérito del candidato demócrata oponente”.
La más reciente encuesta realizada por el diario The Arizona Republic, Noticias Morrison y Cronkite, muestra que el rival demócrata de Arpaio, Paul Penzone cuenta con el apoyo de casi el 46% del electorado frente al 31% que apoya al sheriff del condado de Maricopa. Tras ganar las primarias la imagen de Arpaio tuvo su más duro revés cuando el 11 de octubre, fiscales federales en Phoenix, lo acusaron por desacato a las órdenes emitidas en 2007 que le exigían frenar la persecución a latinos con patrullas policiales .Su controversial figura junto a la de Trump, han sido el epicentro del activismo de una población latina cada vez más política, que se registró en números sorprendentes para esta elección. Según Lupita Juárez, vocera de la coalición One Arizona, su campaña “Viva the Vote” logró registrar 150,438 votantes de minorías.
Cifras de la Secretaría de Estado de Arizona demuestran que en 2010, el año en que Arizona aprobó la polémica ley anti-inmigrante SB1070, había 50.000 latinos registrados para votar por correo. A la fecha ese número aumentó a 350,000. La campaña #bAZta Arpaio tendrá su mayor esfuerzo de movilización de votantes este sábado con una jornada entera de protestas en contra de su candidatura.
Activistas protestan a las afueras de la corte en contra del sheriff Joe Arpaio Univision
“Si gana Arizona, Clinton podría traer republicanos a la mesa sobre la reforma migratoria, demostrando quela postura de línea dura de inmigración de Trump fue una estrategia electoral para perder”, aseveró el profesor Herrera.
Michelle lo sabe muy bien y por eso no perdió la oportunidad de mencionar el tema en una de sus múltiples puyas contra Trump aquí en Arizona. En su discurso dijo que por haber vivido "en una torre tan alta y en un mundo de clubes exclusivos... Tal vez por eso este candidato piensa que ciertos inmigrantes son criminales - en lugar de gente que trabaja hasta dejar sus dedos en los huesos para dar a sus hijos una vida mejor... porque él realmente no los conoce".
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