EPO.-SANTO DOMINGO.- Cada vez que desde el gobierno se produce un aumento exorbitante al gas licuado de petroleo, los chóferes del concho amenazan con aumentar el pasaje, a sabiendas que es un incremento abusivo, en mucho caso los hombres del volante dejan al precio anterior el pasaje por que reconocen que ese servicio esta en cuidado intensivo y que menos gente ocuparan los destartalados asientos de su medio de transporte. Cuando esto sucede casi siempre sale un funcionario del gobierno defendiendo el aumento de los combustible, olvidan estos funcionarios palaciego que no es solo el gas el problema de los hombres del volante, también hay que hablar de gomas y repuestos y en mucho caso el pago diario del alquiler del vehículo. La mayor parte de los carros de concho son de la década del 80 y ya su carrocería no resiste una reparación mas, lo puede ver por doquier casi todos transitan por las calles amarrado con alambre debido a que no aparecen los repuestos.
Pero cuando se produce el aumento del GLP las autoridades solo piensan en los chóferes, y que me dicen de las amas de casa, esas hanegadas mujeres que utilizan ese tipo de combustible para cocer la comida en sus hogares, y que me dicen de las mujeres que tienen un pequeños negocios donde producen el pan de cada día para sostener a su familia.
Somos quizás el único país del mundo donde todavía se utiliza este medio de transporte, y los hombres del volante en su mayoría viejo y conchar es lo único que pueden hacer ya que por la edad no le dan trabajo ni siquiera para hacer eso mismo.
Yo creo que una solución seria que la gente pague por distancia, comenzando en 20 pesos y cada cantidad de kilómetro se haga un amento de 5 pesos, ya que si el gas no baja este tipo de transporte desaparecerá.
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