La firma farmacéutica Pfizer produce el medicamento para la defunción eréctil en Ringaskiddy y las personas aseguran que la proximidad de la fábrica con la ciudad tienen efectos sobre los hombres y los perros.
Barmaid Debbie O’Grady le dijo al Sunday Times: “Una bocanada y está rígido. Hemos estado recibiendo los vapores del amor de forma gratuita desde hace años“.
Mientras que una señora, con mucho humor, aseguro que para todos los hombres que tiene un problema en esa área, vivir en su pueblo es una bendición.
“Nuestros procesos de fabricación siempre han sido muy sofisticados, así como altamente regulados”, dijo un representante de Pfizer.
A pesar de las declaraciones de la compañía, los locales han estado convencidos de que el amor está en el aire desde 1998, cuando The Independent informó por primera vez la historia. Si bien los residentes parecían tener buen carácter por ser conocidos como una ciudad de Viagra en el último tiempo algunas cosas les molestaron.
Según el informe de 1998, algunos lugareños estaban molestos por los periodistas que escribieron que la planta química hizo que los perros de la zona se pusieran cachondos. Otros se sintieron menos acogedores ante la presencia de grandes fabricantes.
“Pfizer nos dijo que lo que vertían en el agua era 100 por ciento seguro, pero es ridículo sugerir que cualquier compañía química está completamente limpia”, dijo Martin O’Driscoll.
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