Afecciones digestivas, intestinales, gástricas, musculares y hasta el dolor de cabeza pueden ser mitigados bebiendo un té de manzanilla. Esta hierba es una de las más conocidas y utilizadas para sanar naturalmente. Estudios señalan que actúa como antiinflamatoria, relajante y antibacteriana. Lo común es ingerirla en infusiones, pero también se aplica tópicamente para limpiar heridas y en compresas para desinflamar los ojos (conjuntivitis) o golpes.
2.- Hinojo
Es muy famoso en el mundo culinario por su aporte de sabor y aroma a diversos platillos. Sin embargo, los beneficios para la salud del hinojo son amplios. El más conocido es su efecto en el sistema digestivo. Las personas que sufren de estreñimiento, pesadez estomacal, cólicos o gases tienen en esta hierba a un gran aliado. Resulta un antiespasmódico y diurético natural excelente. Además, su composición incluye sustancias que reducen la presión arterial. También ayuda a las mujeres con los efectos desagradables de la menopausia y regula la menstruación.
4.- Orégano
¿A quién no le gusta una pizza con mucho orégano? Esta sabrosa y popular hierba es muy fácil de incluir en el menú y aprovechar sus propiedades. Preparada como té, cataplasma o jarabe resulta un remedio fabuloso para mejorar la salud general del organismo. Su principal campo de acción es el hígado, pues lo protege y regula su funcionamiento. Desinflama, combate las alergias, fortalece el sistema óseo y disminuye el azúcar en la sangre, lo que le hace ideal para los diabéticos.
ESPINO BLANCO
De todas las hierbas medicinales, el espino blanco es la más recomendada para proteger el corazón. Esta planta contiene taninos, flavonoides, polifenoles y vitaminas que benefician la salud cardiovascular. Se consigue en tiendas naturistas (preparados fitoterápicos) y se indica como un complemento en el tratamiento de taquicardias, fallas en la tensión arterial y ataques ligeros de ansiedad. Es un dilatador de los vasos sanguíneos, lo que favorece la circulación y el bombeo de sangre.
6.- Tomillo
Esta hierba es muy empleada en la cocina, pero sus usos medicinales también son importantes. Es descongestionante y expectorante, lo que alivia problemas respiratorios. Igualmente, su infusión ayuda a aliviar problemas estomacales. Combinar limón y tomillo en un té es un remedio excelente para aliviar las molestias de la artritis. También se usan cataplasmas de la planta para relajar los músculos y cicatrizar heridas superficiales de la piel.
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