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EP.-FLORIDA.-Aunque todavía no se determina un número específico de inmigrantes que están saliendo de Florida, el éxodo de trabajadores indocumentados y sus familias se está volviendo un escenario común en el estado, debido a la entrada en vigor de la Ley SB 1718.
Así lo revelan varios reportes de organizaciones civiles y medios de comunicación, incluido un reciente informe de NBC News y Telemundo.
“Esto está pasando a un nivel tan rápido que no tenemos un número concreto”, dijo Rosa Elera, de Florida Immigrant Coalition.
Se estima que unos 800,000 trabajadores indocumentados viven en Florida, pero muchos de ellos viven en familias mixtas y tienen hijos estadounidenses, por lo que el impacto de la Ley SB 1718 es mucho mayor, considerando los castigos que impone a quienes ayuden a estos inmigrantes.
El miedo es el principal motivo de la salida de inmigrantes del estado gobernado por el republicano Ron DeSantis.
David Guerra, por ejemplo, un trabajador de la construcción dijo que debió mudarse y abandonar su negocio en Tampa.
“Estaba bien, bien, bien situado en Florida. Me iba bien económicamente, estable con el trabajo. No había ningún problema. Ahora es todo lo contrario”, dijo a Telemundo.
Es difícil conocer la situación real de cómo está impactando a los negocios la falta de fuerza laboral, principalmente en los sectores agrícola y de servicios (hotelería y restaurantes), así como jardinería, porque los empleadores temen hablar públicamente.
“Muchos dueños de negocios se niegan a hablar públicamente sobre la medida, por temor a que pueda antagonizar a DeSantis”, publicó The Tallahassee Democrat.
La Ley SB 1718 entra en vigor el 1 de julio y obligará a empresas de más de 25 empleados a utilizar el sistema E-Verify, así como castigar a quienes transporte a indocumentados, exigir a hospitales preguntar el estatus migratorio, además de desconocer las licencias de conducir de otros estados
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