SANTO DOMINGO-.Con la partida del primer Papa latinoamericano, el mundo despide a una figura que reformó la Iglesia con humildad, rompió moldes con su lenguaje directo y dejó un legado de compasión, justicia social y apertura al cambio.
El Vaticano ha confirmado el fallecimiento del Papa Francisco, el primer pontífice jesuita, argentino y latinoamericano de la historia. Su muerte, ocurrida en la residencia de Santa Marta a los 88 años, ha causado una profunda conmoción global. Líderes religiosos, jefes de Estado, intelectuales, fieles y hasta críticos se han unido en una misma voz para reconocer el papel histórico de Jorge Mario Bergoglio: un Papa que desafió la solemnidad del cargo para abrazar la sencillez, hablar sin filtros y devolverle a la Iglesia Católica una cara humana, cercana y combativa ante las injusticias.
El Papa que cambió el tono, no la fe
Desde su elección en 2013, Francisco rompió con siglos de formalismos. Rechazó vivir en el Palacio Apostólico para quedarse en la humilde Casa Santa Marta. Viajaba en autos pequeños, lavaba los pies a presos y migrantes cada Semana Santa, y convirtió al papado en un púlpito global para hablar no solo de Dios, sino de pobreza, migración, corrupción, cambio climático, guerras, abuso sexual en la Iglesia y derechos humanos.
Fue incómodo para muchos dentro del Vaticano, pero amado por millones fuera de él.
Sus reformas no fueron solo estéticas. A nivel institucional, Francisco impulsó una modernización de las finanzas vaticanas, luchó contra el clericalismo, creó comisiones para enfrentar los abusos y abrió el diálogo sobre temas antes intocables, como el papel de las mujeres en la Iglesia, la posibilidad del celibato opcional o el respeto a personas LGBT.
Las frases que lo inmortalizaron
Francisco no hablaba en latín, hablaba en X (Twitter). Su lenguaje fue directo, humano, a veces provocador. Estas son algunas de sus frases más emblemáticas:
«¿Quién soy yo para juzgar?«— Sobre los homosexuales, rompiendo décadas de condena en una sola pregunta.
«La Iglesia es un hospital de campaña después de la batalla.«— Para recordarle al mundo que su rol era sanar, no condenar.
«El dinero debe servir, no gobernar.«— Una crítica directa al capitalismo salvaje.
«Prefiero una Iglesia accidentada, herida y manchada por salir a la calle, que una Iglesia enferma por encierro.«— Llamado a una fe activa, no de museo.
«La indiferencia mata.«— Denunciando la falta de empatía global ante los migrantes y los pobres.
Un legado más allá del Vaticano
Francisco se convirtió en un referente moral más allá de la religión. Recibió premios de organismos humanitarios, se reunió con ateos, científicos, víctimas y líderes políticos de todos los credos. Su encíclicaLaudato Si’sobre el cuidado de la casa común marcó un antes y un después en la conciencia ecológica mundial. Fue citado en foros climáticos, universidades, movimientos sociales y tratados internacionales.
Amado en América Latina, respetado en África, escuchado en Asia, Francisco dejó de ser solo el jefe de la Iglesia Católica para transformarse en conciencia global.
El final de un ciclo, el inicio del mito
La muerte del Papa Francisco abre una nueva etapa para el Vaticano. Su sucesor enfrentará el reto de continuar con reformas aún inconclusas, de mantener el espíritu pastoral por encima del dogma, y de no retroceder frente a sectores conservadores que siempre vieron su papado con recelo.
Pero más allá de lo que vendrá, hoy el mundo lo despide como a un líder profundamente humano. Un Papa que supo abrazar, reír, llorar y hablarle a los olvidados.
Preguntas para el futuro
¿Será su legado continuado o sepultado por las fuerzas conservadoras del Vaticano? ¿Se consolidará la apertura de la Iglesia hacia los desafíos del siglo XXI? ¿Quién recogerá la bandera de un pontificado que predicó con gestos más que con doctrinas?
Francisco no será recordado por sus tiaras ni por encíclicas pomposas, sino por gestos simples que conmovieron al mundo. Por haber bajado del trono, y subido al corazón de millones. Su muerte no es el final de una era, sino el inicio de una leyenda. Porque el Papa del pueblo no solo fue un líder espiritual… fue un hombre que desafió al mundo con amor.
ROMA-. El Vaticanodio a conocer el testamento delpapa Francisco, redactado en 2022, quien murió este lunes a los 88 años a causa de un derrame cerebral y una insuficiencia cardíaca irreversible, informó oficialmente
En él, el pontífice expresó su deseo de ser sepultado en la Basílica de Santa María la Mayor, en Roma, un lugar de profunda devoción mariana para él. Allí acudía antes y después de cada viaje apostólico, según explicó en su escrito.
Francisco pidió que su tumba esté ubicada entre la Capilla Paulina y la Capilla Sforza, al nivel del suelo, sin ornamentaciones especiales y con una inscripción única: Franciscus.
Asimismo, agradeció a quienes rezaron por él y ofreció sus últimos sufrimientos “por la paz mundial y la fraternidad entre los pueblos”. También dejó instrucciones claras para que los gastos de su entierro sean cubiertos por un benefactor anónimo, a través de Mons. Rolandas Makrickas.
El papa argentino concluyó su testamento invocando a la Santísima Trinidad y renovando su confianza en la Virgen María, a quien encomendó su vida y ministerio sacerdotal.
En el nombre de la Santísima Trinidad. Amén
Sintiendo que se acerca el fin de mi vida terrena y con viva esperanza en la vida eterna, deseo expresar mi voluntad únicamente respecto al lugar de mi sepultura.
“Siempre he confiado mi vida y mi ministerio sacerdotal y episcopal a la Madre de Nuestro Señor, Santa María. Por lo tanto, pido que mis restos mortales descansen en espera del día de la resurrección en la Basílica Papal de Santa María la Mayor.
Deseo que mi último viaje terrenal termine precisamente en este antiguo santuario mariano donde iba a orar al inicio y al final de cada viaje apostólico, a confiar mis intenciones a la Madre Inmaculada y agradecerle su dócil y materno cuidado.
Pido que mi tumba sea preparada en el nicho de la nave lateral entre la Capilla Paulina (Capilla de la Salus Populi Romani) y la Capilla Sforza de la mencionada basílica como indicado en el anexo adjunto.
El sepulcro debe estar en la tierra; sencillo, sin decoración particular y con la única inscripción: Franciscus.
Los gastos para la preparación de mi entierro serán cubiertos por la suma del benefactor que he dispuesto. He proporcionado instrucciones pertinentes a Mons. Rolandas Makrickas, Comisionado Extraordinario del Capítulo Liberiano.
Que el Señor les dé la recompensa merecida a quienes me amaron y seguirán orando por mí. Ofrecí al Señor el sufrimiento que se hizo presente en la última parte de mi vida por la paz mundial y la fraternidad entre los pueblos.
CIUDAD DEL VATICANO-.Aunque solo el tiempo dirá si sus reformas más audaces perdurarán, Francisco será recordado como un papareformador que aceleró procesos de cambio dentro de la Iglesia. Francisco será recordado también como un papa muy popular, tal vez más por fuera de la Iglesia, entre los no cristianos.
Desde el primer año de su pontificado, el obispo de Roma creó un "consejo de cardenales" provenientes de los cinco continentes, encargado de ayudarle en la redacción de la nueva Constitución Apostólica, el "reglamento interno" de la Curia. Esta fue publicada en 2022 y reforzó el vínculo entre el Vaticano y las iglesias locales.
Proyectos del papa
Uno de los grandes proyectos de reforma lanzados por el papa argentino fue el sínodo, asamblea de obispos y expertos de todo el mundo, una estructura creada en 1965 por Pablo VI en el espíritu del Concilio Vaticano II.
En varias ocasiones, Francisco convocó en Roma estas grandes asambleas encargadas de abordar temas sobre los cuales la Iglesia tiene algo que decir: evangelización, lugar de los laicos y de las mujeres en la institución.
Una nueva cultura
Para el papa, se trataba de insuflar una nueva cultura en la Iglesia, más en sintonía con las expectativas de los fieles y en la que cada Iglesia local tuviera voz.
Asambleas que dejaron un sabor a inconcluso en ciertos temas como el del lugar de las mujeres, ya que Francisco cerró la puerta al diaconado femenino.
El papa intentó una mayor integración de divorciados que se han vuelto a casar, así como de las personas homosexuales.
La comunión
Durante su pontificado se autorizó la comunión para ellos bajo ciertas condiciones, pero la implementación fue confusa. La acogida a personas homosexuales fue evitada en 2015 y postergada a 2023. A finales de ese año, solo se permitió para ellas la bendición, lo que desató controversia y un franco rechazo en África.
En 2019, tras el sínodo amazónico, se aprobó permitir que laicos casados se ordenaran en esa región. Francisco postergó la decisión, generando frustración en los sectores progresistas.
Francisco pretendía también más democracia y descentralización en la Iglesia, pero aún no se ven resultados concretos. No se avanzó en dar mayores responsabilidades a los laicos ni en la ordenación de mujeres diáconos, lo que provocó decepción entre los progresistas.
La primera homilía
El 19 de marzo de 2013, seis días después de su elección, el nuevo papa pronunció su primera homilía durante la misa de entronización, ante una plaza de San Pedro colmada. Ya entonces evocó lo que sería una de las marcas de su pontificado: la protección de la naturaleza, de la creación.
Esta intuición, una constante guía de su pontificado, se concretó en un texto que recorrió el mundo: su encíclicaecológicaLaudato Si, publicada en junio de 2015, pocos meses antes de la COP21 en París. Fue el primer texto pontificio que abordó explícita y detalladamente la protección de "la casa común".
El documento traspasó ampliamente las fronteras de la Iglesia católica, fue celebrado en todo el mundo y se convirtió en una referencia para ecologistas y defensores del decrecimiento.
Esta preocupación en Francisco era la de una "ecología integral" en la que la dignidad humana y su entorno están intrínsecamente ligados. También se manifestó durante el sínodo sobre la Amazonía, organizado en el Vaticano en octubre de 2019.
El papa Francisco fue también quien trajo un nuevo lenguaje a la Iglesia, que desconcertó a numerosos feligreses y observadores. Este papa hablaba en un tono nuevo, tanto dentro de la Iglesia como hacia los no creyentes.
Anécdotas
Durante el Ángelus dominical, Francisco no dudaba en contar anécdotas a los fieles para transmitir un mensaje, recurriendo a la cultura popular italiana (hablaba con frecuencia de los nonni, los abuelos). En sus homilías, salía regularmente del texto original.
Tampoco dudaba en reprender, incluso en regañar, denunciando en múltiples ocasiones el clericalismo en la Iglesia. Francisco criticaba a "los obispos de aeropuerto" para invitarlos a estar más cerca de sus fieles. Los sacerdotes también, empezando por el clero de Roma, no ocultaban su sorpresa con sus advertencias al "narcisismo" y la mundanidad.
Francisco era así, se arriesgaba a ser impopular, incluso dentro de la Iglesia. Las mayores resistencias provinieron del interior del Vaticano.
El 22 de diciembre de 2014, con ocasión de sus saludos navideños a la Curia, Francisco enumeró "15 enfermedades" que acechaban a sus principales colaboradores: vanidad, chismes, indiferencia hacia los demás... El cuadro fue una carga contundente. Nunca un pontífice se había expresado de ese modo.
Este papa que "rompe los códigos" le atrajo profundas enemistades en la Curia. Figura destacada de sus opositores: el cardenal estadounidense Raymond Leo Burke. Este ultraconservador se hizo notar sobre todo durante el primer sínodo sobre la familia, organizado por Francisco en octubre de 2014.
El ex arzobispo de San Luis se opuso firmemente a la posibilidad de dar la comunión a los divorciados vueltos a casar y arrastró consigo a varios cardenales. Burke declaró estar dispuesto a "resistir".
Francisco será recordado sobre todo como un papajesuita, cuyo pensamiento siempre estuvo en movimiento. Un papa paradójicamente más popular fuera de la Iglesia que dentro de ella.
Esa palabra no domesticada también levantó ampolla. En varias ocasiones durante su pontificado, Francisco sorprendió a sus interlocutores, sobre todo durante las ruedas de prensa en el avión que lo traía de regreso de sus viajes apostólicos.
A finales de julio de 2013, tras su primer viaje apostólico a Río de Janeiro, donde presidió la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), el sumo pontífice fue invitado a pronunciarse sobre los homosexuales y en particular sobre un eventual "lobby gay" en el corazón del Vaticano.
"Si una persona es gay y busca al Señor, demuestra buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarla?", lanzó, proyectando de inmediato la imagen de un papa "gay-friendly", en ruptura con sus predecesores.
En varias ocasiones, el lenguaje de Francisco dio la vuelta al mundo, a veces de forma polémica. En 2018, durante una audiencia en la plaza de San Pedro, comparó a los médicos que practican el aborto con "sicarios". Una expresión que escandalizó y que repitió en septiembre de 2024 tras un viaje a Bélgica.
También en dos ocasiones, Francisco se quejó de que hubiera "una atmósfera de mariconería" en algunos seminarios. Ante el concierto de protestas, el Vaticano publicó un comunicado en el que explicaba que "el papa Francisco nunca tuvo la intención de ofender a nadie ni de emplear términos homofóbicos".
Otra declaración que dio la vuelta al mundo ocurrió en enero de 2018. Francisco regresaba de un difícil viaje a Chile, donde la Iglesia estaba devastada por escándalos de pedofilia. Interrogado sobre un obispo acusado de encubrir a un sacerdote depredador sexual, el papa se irritó y "pidió pruebas" a las víctimas.
Una reacción que causó escándalo. Semanas más tarde, el papa reconoció "graves errores" en la gestión de la crisis de los abusos sexuales en Chile y pidió perdón.
Como al final del pontificado de Benedicto XVI, el drama de los crímenes sexuales cometidos por hombres de Iglesia marcó de forma dolorosa el pontificado de Jorge Mario Bergoglio. El papa Francisco prolongó la lucha de su predecesor, quien fue el primero en querer enfrentarse con determinación a este flagelo.
En marzo de 2014, creó la Comisión Pontificia para la Protección de Menores y puso al frente a uno de sus allegados, el cardenal estadounidense Sean O´Malley, arzobispo de Boston, una diócesis que vivió de lleno la crisis pedófila.
El objetivo era sensibilizar mejor a los responsables de la Iglesia sobre los abusos sexuales, escuchando también el testimonio de las víctimas.
La cuestión de la eficacia real de esta comisión sigue abierta debido a varias renuncias de sus miembros y a su adscripción, en 2022, al dicasterio para la Doctrina de la Fe, el único habilitado para juzgar internamente los crímenes sexuales más graves.
En febrero de 2019, Francisco convocó a los jefes de las conferencias episcopales del mundo entero a una cumbre centrada en estos abusos sexuales. Si bien hubo una toma de conciencia en lo más alto de la jerarquía, los resultados concretos tardaron en aparecer.
El pontificado del papa Francisco estuvo también inevitablemente marcado por sus viajes. El primero fue sin duda uno de los más significativos. El 8 de julio de 2013, se dirigió a la pequeña isla italiana de Lampedusa, frente a las costas libias.
Denunció la "mundialización de la indiferencia" ante la muerte de miles de personas en el Mediterráneo. La acogida a los migrantes era, según él, la marca de la caridad cristiana, y no dejó de repetirlo en sus desplazamientos.
Durante su visita a Marsella en septiembre de 2023, Francisco se recogió ante el memorial de los desaparecidos en el mar, a los pies de Notre-Dame de la Garde.
A finales de 2015, Francisco pisó Bangui, entregada a la violencia de las milicias. Desafió los riesgos de seguridad para lanzar allí "el año jubilar de la misericordia". Como sus predecesores, el papa quiso ser un agente de reconciliación, pero buscó las "periferias": los más pobres y olvidados.
Una palabra que repitió con frecuencia y que mostró su voluntad de descentralizar la mirada de la Iglesia sobre el mundo. Esas periferias se manifestaron en la elección de sus viajes apostólicos, al lado de comunidades cristianas a veces minúsculas y aisladas, como en Mongolia o Papúa Nueva Guinea.
SANTIAGO.– La Policía Nacional informó este domingo fue abatido tras enfrentar a tiros a una patrulla de la Dirección Central de Investigación (Dicrim), la tarde del sábado, en el sector Ensanche Bermúdez de esta ciudad.
Se trata de Juan Hidalgo Solano, de 21 años, residente en la provincia Espaillat, conocido por los alias de “Morenaje”, “Lolo”, “Juancito” y/o “Visita”.
A Morenaje supuestamente se le atribuían múltiples hechos delictivos cometidos en Santiago y Moca, incluyendo asaltos en residencias y en la vía pública.
Según el informe policial, Hidalgo Solano operaba irrumpiendo armado en viviendas, donde despojaba a las víctimas de sus pertenencias bajo amenazas, y en algunos casos agredía sexualmente a mujeres, conforme a denuncias recibidas.
Detalles del caso
Al ser localizado por los agentes actuantes, el individuo abrió fuego contra la patrulla, lo que obligó a los oficiales a repeler la agresión, resultando herido. Fue trasladado a un centro de salud, donde falleció mientras recibía atenciones médicas.
Evidencias ocupadas
En la escena fueron recolectadas como evidencias una pistola calibre 9 mm con dos cápsulas, utilizada para atacar a los agentes; cinco casquillos, un proyectil mutilado y una porción de polvo blanco, presumiblemente cocaína.
El cadáver fue enviado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) para los fines legales correspondientes.
Prontuario
Juan Hidalgo Solano figuraba con múltiples órdenes de arresto activas, entre ellas las identificadas con los números AJ0016240, AJ001561-3, AJ0010990, AJ0009709 y AJ0017121-2025. Además, había sido captado por cámaras de vigilancia mientras cometía varios de los delitos que se le imputan.
CIUDAD DEL VATICANO.-Jorge Mario Bergoglio, conocido en todo el mundo como el papa Francisco, murió este lunes 21 de abril, a los 88 años. Se detalla que el pontífice falleció en su residencia de la Casa Santa Marta del Vaticano.
El líder de la Iglesia católica padecía una "pulmonía bilateral" con "infección polimicrobiana". El 14 de febrero, el pontífice fue ingresado en el Hospital Policlínico Agostino Gemelli tras sufrir durante varios días un ataque de bronquitis. Cuatro días después, sus médicos le diagnosticaron una neumonía bilateral debido a que la situación clínica empeoró gradualmente. Tras 38 días hospitalizado, el papa Francisco regresó a su residencia vaticana de la Casa Santa Marta para continuar con su recuperación.
En los últimos años, Francisco había sufrido varios problemas de salud. Se movilizaba en una silla de ruedas debido a dolores de rodilla y de espalda. Y en diciembre pasado, un accidente doméstico le dejó un apreciable moretón en el cuello.
"Hagan lío"
Uno de los rasgos más característicos del papa Francisco fue su cercanía hacia los jóvenes, a quienes consideraba como "la esperanza de un futuro mejor".
Fue muy recordada su participación en la Jornada Mundial de la Juventud en Brasil, en julio de 2013. Se trató de su primer viaje internacional como autoridad máxima de la Iglesia católica. Ante la masiva presencia de jóvenes de toda Latinoamérica, dejó grabada para siempre la frase "hagan lío", y dijo que quería ver a la Iglesia "en la calle".
También se mostró siempre como un amante de los deportes, y, a pesar de la distancia, nunca dejó de recordar su amor al club de fútbol del que era hincha en Argentina, el San Lorenzo de Almagro, institución 'azulgrana' fundada por el sacerdote salesiano Lorenzo Massa, en 1908.
Legado papal
Durante su mandato como sumo pontífice de la Iglesia católica, visitó más de medio centenar de países llevando un mensaje de paz, humildad, armonía social y respeto a los valores democráticos. También se ha caracterizado en su labor papal por denunciar las desigualdades sociales, criticar el sistema capitalista y rechazar con firmeza los delitos sexuales en el clero.
Gracias a sus ideas reformistas, rompió las viejas estructuras de la Iglesia católica, no solo desde lo discursivo sino también mediante sus políticas como autoridad máxima de la institución religiosa.
A partir de su llegada, endureció las leyes para perseguir la pederastia en el Vaticano, por ejemplo, obligando a los jerarcas de la Santa Sede a denunciar los casos de abuso sexual. También, y por primera vez después de 40 años, modificó el Código de Derecho Canónico para permitir formalmente a las mujeres asumir más roles dentro de la Iglesia católica. Además, se pronunció a favor de permitir la unión civil entre homosexuales porque "son hijos de Dios y tienen derecho a una familia".
No obstante, el Vaticano aclaró poco después que "no es lícito" para la institución eclesiástica otorgar una bendición para las relaciones entre personas del mismo sexo.
El primer papa americano
Mario Bergoglio fue elegido papa el 13 de marzo de 2013, luego de la renuncia de Benedicto XVI, el alemán Joseph Aloisius Ratzinger. El argentino se convirtió así en el primer papa americano y de la Orden Jesuita. Tomó el nombre de Francisco en honor a San Francisco de Asís, fundador de la Orden Franciscana. Dos años antes, había presentado su renuncia como arzobispo de Buenos Aires, al alcanzar la edad de 75 años, pero Benedicto no se la aceptó.
Jorge Mario Bergoglio nació el 17 de diciembre de 1936 en el barrio de Flores, Buenos Aires, en el seno de una familia modesta de un trabajador ferroviario de origen piamontés y una ama de casa. Asistió a la escuela pública, donde se tituló como técnico químico. Completó los estudios de Humanidades en Chile en 1963. Al regresar a Argentina, se unió a la Compañía de Jesús, donde obtuvo una licenciatura en Filosofía. Tenía entonces 22 años.
Entre 1964 y 1966 fue profesor de literatura y psicología en colegios religiosos de Buenos Aires. De 1967 a 1970, estudió Teología en el Colegio San José y obtuvo la licenciatura.
Le ordenaron sacerdote en 1969. A los 36 años fue designado responsable nacional de los jesuitas argentinos, cargo que desempeñó durante seis años.
Carrera sacerdotal
A mediados de los 80, viajó a Alemania para obtener su doctorado y a su regreso retomó la actividad pastoral como simple sacerdote de provincia en la ciudad argentina de Mendoza.
En 1986 regresó a Europa, concretamente a Alemania, para ultimar su tesis doctoral, pero fue trasladado a la ciudad argentina de Córdoba para ejercer como director espiritual y confesor de la Compañía de Jesús.
El 20 de mayo de 1992, el papa Juan Pablo II lo designó obispo de la diócesis de Auca y obispo auxiliar de la diócesis de Buenos Aires. Cinco años más tarde, en 1997, fue nombrado arzobispo coauditor de Buenos Aires y en 1998, tras la muerte del arzobispo y cardenal Antonio Quarracino, se convirtió en el arzobispo de Buenos Aires.
Desde entonces, Bergoglio tuvo una gran presencia en la Conferencia Episcopal Argentina, la asamblea de los obispos que presidió durante seis años, de 2005 a 2011.
Bergoglio y la política argentina
Fue justamente durante ese período que el entonces arzobispo de Buenos Aires mantuvo una férrea disputa con los gobiernos de Néstor Kirchner (2003-2007) y su esposa Cristina Fernández (2007-2015), debido a sus constantes críticas al "exhibicionismo y los anuncios estridentes", y a la pobreza, que había llegado a niveles extremos en 2002. También, por su oposición declarada al matrimonio igualitario, ley impulsada y aprobada por el kirchnerismo.
"Es la pretensión destructiva al plan de Dios", señalaba entonces.
Con la muerte de Néstor Kirchner en 2010, la tensión continuó. Cristina Fernández, al igual que lo hizo su marido en el poder, evitaba participar del Tedeum, la celebración religiosa que la Iglesia argentina realiza todos los años en la Catedral de Buenos Aires cada 25 de mayo, al cumplirse el aniversario de la revolución que inició el camino hacia la independencia.
Tras el nombramiento de Bergoglio como papa, la entonces mandataria Cristina Fernández participó de su asunción en el Vaticano en 2013, y luego mantuvo otros seis encuentros bajo un clima ameno y hasta amistoso. Incluso, Francisco se comunicó con la vicepresidenta para solidarizarse luego del intento de asesinato que sufrió en agosto de 2022, cuando un hombre intentó dispararle con un arma.
SANTO DOMINGO.- El abogado Carlos Salcedo analizó en el espacio “Cátedra Jurídica”, desde el punto de vista del derecho las causas y consecuencias para los responsables en la tragedia ocurrida con el desplome del techo de la discoteca Jet Set, afirmando que existen elementos para incoar una acción penal por homicidio involuntario.
Al ser entrevistado por el doctor Manuel Conde, Salcedo calificó como una “omisión grave” la inobservancia del deterioro del techo del edificio, suficiente para emprender acciones de carácter penal aunque de manera involuntaria.
“Lógicamente, es una omisión grave y eso califica para un homicidio involuntario, si se demuestra efectivamente la omisión y del cumplimiento del deber de cuidado y al mismo tiempo la inobservancia de reglamentos”, explicó.
Sin embargo, el togado dejó claro que obviamente no debe calificarse como asesinato, pues no existen los elementos para tales fines. “No hubo premeditación ni asechanza”.
Salcedo agregó que las personas con calidad para accionar en materia penal por la tragedia que cobró la vida de más de 230 personas, pueden comenzar constituyéndose en actores civiles y querellarse ante los órganos correspondientes.
Recordó que los que decidan querellarse contra los responsables de la tragedia ocurrida la madrugada del pasado martes 8 de abril, tendrán el acompañamiento del Ministerio Público, a los fines de implementar un expediente lo suficientemente fuerte para que pueda tener ganancia de causas ante un juez, aunque recordó que la pena oscila entre 6 meses y dos años de cárcel.
“El código establece claramente una sanción no mayor de dos años de extensión correccional”, sostuvo al detallar las penas correccionales establecidas para el homicidio involuntario.
Enumera elementos para incoar demandas en el plano civil
El abogado Carlos Salcedo también enumeró una serie de elementos, de acuerdo a su análisis, existen en el caso de la tragedia Jet Set para impulsar acciones civiles, aunque aclaró que debido a la cantidad de afectados, las pólizas de seguros probablemente no dispongan de los recursos para resarcir los daños.
Detalló que en el caso del Jet Set se puede deducir que hubo una falta, un perjuicio y una lección, las cuales al ser demostradas ante un juez, se constituyen en los elementos para incoar una acción civil.
“Tiene que haber una relación de causa y efecto entre la falta que ya nosotros hemos enunciado y el perjuicio. Es decir, cuando hay una falta de relación entre estas dos, finalmente si no se da esa relación de nexos causal, esa relación entre la falta y el perjuicio y la lección, efectivamente no califica como falta para fines de sanciones en el aspecto civil. Pero en este caso particular, todo apunta a que hay una lección causada, un perjuicio causado”, explicó.
El abogado Carlos Salcedo argumentó sobre el tema al referirse a la tragedia ocurrida en la discoteca Jet Set, la cual cobró la vida de 231 personas y más de 200 heridos, al desplomarse el techo de la discoteca mientras el cantante Rubby Pérez amenizaba la noche, quien también falleció en la tragedia.
El programa “Cátedra Jurídica”, transmitido por la Z101FM, es un espacio dedicado a desentrañar el complejo y fascinante mundo del derecho. Conducido por el doctor Manuel Conde, este programa se adentra en la intrincada red de leyes, jurisprudencias y casos que definen la sociedad.
El Mundial de F1 se ha puesto al rojo vivo con el primer cambio de liderato en la quinta carrera. Quien menos contaba entre los tres grandes en el arranque del campeonato ha asaltado la clasificación: Oscar Piastri, 24 añitos, en su tercera temporada en la Fórmula 1, comanda por primera vez el Mundial gracias a su tercera victoria en cinco carreras, ahora en el GP de Arabia Saudí.
Piastri le ganó la partida a Verstappen en la salida y, después de un coche de seguridad en las primeras curvas, guardó la cabeza de carrera hasta la bandera a cuadros. El australiano logró la tercera victoria de su palmarés, segunda seguida tras Baréin, y su compañero, Lando Norris, lastrado por su mal sábado, fue cuarto.