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La hija menor del presidente Donald Trump quiere ser abogada, aunque existe la duda si será aceptada por sus méritos o por ser descendiente de quien es.
La joven Tiffany Trump tiene como objetivo ingresar a alguna de las más importantes escuelas de leyes del país: Harvard, Columbia y la Universidad de Nueva York, las cuales ya ha visitado, indicó The Washington Post.
Sin embargo, no se pudo comprobar si alguna de esas instituciones ya la aceptó y la duda, indica el diario, es si la está considerando, sobre todo porque su padre ha llamado jueces federales, incluyendo a John G. Roberts Jr., “vergonzoso”, “supuesto”, “odiador” y “tan político”.
De lograr ingresar a la escuela de leyes, la joven de 23 años se sumaría a la lista de hijos de presidentes que acudieron a una institución similar mientras sus padres estaban en la Casa Blanca.
El diario indicó que otros aplicantes tienen dudas si el hecho de que un personaje como ella sea aceptada por sus méritos o ser quien es, dejando a un lado oportunidades para otras personas.
La joven socialité había mantenido un bajo perfil, en medio de la polémica por sus hermanos que laboran en las empresas de su padre y su hermana que tiene una amplia actividad en la Casa Blanca.
Tiffany realizó la Prueba de Admisión para la Facultad de Derecho (LSAT, pos sus siglas en inglés), incluso publicó en su cuenta de Instagram, donde tiene más de 740,000 seguidores.
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