FRANCIA.- El primer ministro de Francia Emmanuel Macron ha recibido un bofetón, no en sentido figurado sino físicamente, en su camino hacia la reelección como primer ministro de Francia. Un ciudadano del departamento de Drome sería el protagonista de la inesperada y sorprendente agresión al máximo mandatario del país galo, lo que supondría su inmediata detención.
La bofetada a Emmanuel Macron provoca la intervención inmediata de los escoltas
Todo sucedería en una visita de Emmanuel Macron al citado departamento francés con motivo de uno de los actos que componen la hoja de ruta de la campaña electoral del hasta ahora primer ministro galo. Para nada esperaba que su acercamiento a la gente que le aclamaba iba a acabar en un guantazo que no iría a más por la rápida intervención de sus escoltas.
Pese a que la multitud se encontraba detrás de una valla de media altura, un hombre sería capaz de impactar en el primer ministro. Macron se había acercado a hablar con él, en lo que todo apuntaba en un amigable momento. Sin embargo, el agresor haría ademán de estrecharle la mano para atacar velozmente con la otra, consiguiendo dar una bofetada al mandatario.
Como no podía ser de otro modo, los escoltas de Macron reaccionarían al instante, consiguiendo alejar al primer ministro de la gente para evitar más golpes, primero, y reduciendo al exaltado ciudadano, a continuación. Superado el susto, el dirigente socialista continuaría con su agenda, mientras que el hombre, que se habría definido como anarquista, pasaría a disposición judicial. También sería detenida otra persona que le acompañaba.
Una muestra más, independientemente de la censurable agresión, que evidencia que no llueve a gusto de todos en Francia. De hecho, el último enfrentamiento político en el que se había visto envuelto Macron en los días previos a este incidente pasaba por el tira y afloja con los alcaldes ecologistas que llegaron al poder en las principales ciudades del país en los anteriores comicios.
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