“Lo que se establecía eran las llamadas tirillas, que no eran más que si una persona mataba a alguien y sabías quién era esa persona mientras se buscaba la orden de apresamiento tú comunicabas a migración que si esa persona iba salir debía ser apresado inmediatamente por la flagrancia”, detalló durante una entrevista en el programa Despierta con CDN.
Dijo, además que, los impedimentos de salida deben de ser expedidos por un juez.
El exfuncionario emitió estas declaraciones tras los comentarios de la actual procuradora de la República, Miriam Germán, indicando que las alertas migratorias funcionaban en la PGR desde gestiones anteriores.
Germán explicó mediante una carta, que en mi calidad de Procuradora General de la República, fijó con claridad mi postura sobre las denominadas -alertas migratorias y sobre la forma en que han venido siendo utilizadas en la historia reciente de la institución.
Consideró reales impedimentos de salida en violación al debido proceso, aun cuando se pretendiesen instrumentar únicamente con la supuesta finalidad de tener conocimiento de los movimientos migratorios de personas bajo investigación.
En ese sentido, instruyó que todas fueran levantadas o dejadas sin efecto, para lo cual compartí mi parecer con el director de Migración, quien estuvo de acuerdo.
"Justo al día siguiente de haber tomado esta decisión recibimos la visita de dos funcionarios que no son del área judicial, presentes además a requerimiento mío estuvo el director de Migración y los titulares del PEPCA y la Dirección de Persecución. En esa reunión reitere que las alertas, que a fin de cuentas devienen en un real impedimenta, estaban eliminadas, que no eran posibles en nuestra legislación actual; sólo según mi criterio el director de Migración, en ese momento", detalló durante una misiva.
Consideró reales impedimentos de salida en violación al debido proceso, aun cuando se pretendiesen instrumentar únicamente con la supuesta finalidad de tener conocimiento de los movimientos migratorios de personas bajo investigación.
En ese sentido, instruyó que todas fueran levantadas o dejadas sin efecto, para lo cual compartí mi parecer con el director de Migración, quien estuvo de acuerdo.
"Justo al día siguiente de haber tomado esta decisión recibimos la visita de dos funcionarios que no son del área judicial, presentes además a requerimiento mío estuvo el director de Migración y los titulares del PEPCA y la Dirección de Persecución. En esa reunión reitere que las alertas, que a fin de cuentas devienen en un real impedimenta, estaban eliminadas, que no eran posibles en nuestra legislación actual; sólo según mi criterio el director de Migración, en ese momento", detalló durante una misiva.
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